domingo, 20 de mayo de 2012

¿Dónde estás?

¿A dónde vuelan las gaviotas cuando el verano se esfuma?
¿Dónde se posa tu mirada cuando no la puedo encontrar?
¿En dónde se esconden las hojas cuando el otoño asecha?
¿Sobre qué se posan tus manos cuando mi cuerpo busca tus caricias?
¿Qué melodías escuchas cuando lanzo al viento mi verdad en palabras que no escucharás más?
¿Quién dijo que sería fácil continuar?
Como tropezar y seguir de pie, como sacar la cabeza para respirar...
¿A dónde se muda el amor cuando el miedo se transforma en realidad?

martes, 27 de marzo de 2012

Sin querer pasó el tiempo

Sin querer pasó el tiempo y si bien mejor yo me siento, también pasa por mí la sensación de querer encontrar tu cuerpo. Decir “eres” y darte cuenta que “fuiste” es el tiempo. Y quedar en STAND BY por un momento. Nostalgia viene a mi encuentro, asiduamente, como un enemigo encubierto que abriga de frío mi cuerpo. Sentirte cerca, tenerte lejos. Situaciones en la que nunca nos hubiésemos puesto.

martes, 20 de marzo de 2012

Al cielo he vuelto a mirar.

Caminos interminables señalizando el alba aproximar.

Restos de senderos de los cuales es mejor despertar.

Recuerdos vivos de un futuro incierto que nunca vendrá.

Apagando el fuego que no se llegó a consumar.

Tu sendero y el mío se cruzaron en un soñar

Y el universo caprichoso no nos dejó concretar.

Cuando veas que miro al cielo sin mirar.
Es que buscando estoy, esos ojos que nunca he vuelto a encontrar

jueves, 9 de febrero de 2012

Mi "Siempre estarás en mi" para Luis A. Spinetta

No recuerdo bien cómo comenzó esta locura, sólo sé que un día cualquiera oí una canción tuya y me enamoré, de por sí me considero una enamorada de la música, de la buena música ( letras profundas, melodías  únicas, esos temas que te hacen transportarte a dónde vaya uno a saber… ) Lo cierto es que desde ese insignificante punto de mi vida te convertiste en EL flaco, mi flaco querido.
Sin darme cuenta en vez de encerrarme en tu música fanatizándome, tus letras me abrieron las puertas hacia otros grandes artistas que aún no había conocido. Siempre pasa (al menos a mí) que cuando algo me gusta, me hace sentir bien, considero que vale la pena… lo muestro a otros, pues flaco, no fuiste la excepción, le comencé a hablar al mundo, mi mundo de vos…  Y vos transformaste, a su vez,  a mi mundo.
Fuiste el primer músico que me llegó de tal manera que me movilizó en todos los sentidos. A través tuyo me hice de amistades, afiancé otras y cometí la locura de seguirte. Entonces lo mejor que me pasó fue enloquecer. IR a verte, acá o allá, y creo que, de haber sabido que era mi última oportunidad de verte y tenía que cruzar el Pacífico nadando, lo hacía. Porque sos conexión, sos luz, sos amor, sos bondad, humildad, gracia, sos único flaco…
Cuando me enteré que estabas enfermo le pedí a mis amigos que rezaran por vos y también lo hice, le pedí que no sufrieras y, al parecer, Dios me escuchó. Triste hubiera sido saberte internado meses, haciendo quimios, desmejorándote y con el mismo fin. No sé específicamente como habrán sido tus últimos días, pero por el tipo de ser que sos, lo más acertado fue volver a casa con tu familia, tus amores y disfrutarlos hasta el final.
Ayer me enteré que ya no estabas entre nosotros, debo confesar que, al principio, pensé que era una broma, pero cuando me dieron más detalle una presión en el pecho me empezó a invadir, ya no estabas más, quién diría! No podía irme de donde estaba pero de haberlo podido hacer me tomaba el primer tren a la luna.
Siento ésta pérdida, no como el rock nacional, porque fuiste más que eso, yo te sentí como un padre, que con cada melodía enseñaba a sus hijos. De vos aprendí flaco, y no debo ser  la única. Me enseñaste que: “mañana es mejor”, “no hay ningún momento que se pueda comparar al amor”, “deberás crecer sabiendo reír y llorar”, “si no canto lo que siento, me voy a morir por dentro”, aprendí que “el mundo por duro y triste que sea, todavía tiene esperanzas”, “dale luz al instante”, sembrar en el jardín de gente,  que mi tiempo es hoy, que debo aprender a volar, a ser luz, a reír, debo subirme al árbol! Hasta me complacías en los recitales cuando tocabas algún tema que quería escuchar en vivo.
Sos amor flaco, y así como te impusiste y sobrepasaste los límites de la música, así mismo no habrá nunca algo o alguien que pueda callarte. Tu música es inmortal, tus letras son inmortales, tu poesía, tus enseñanzas y tu persona. Porque tal vez una enfermedad te silencie, pero lo que dejaste en nosotros es inmortal.
Para mí, personalmente “siempre serás alma de diamante”.
Ésta foto la tomé el 04/12/2009 Nunca olvidaré esas 5 horas en el paraíso musical.-